Es la inflamación del páncreas. Suele provocarse cuando nuestros bulldogs comen comidas grasas en exceso, aunque existen otras causas, como traumatismos, obesidad, algunos fármacos, etc.
El páncreas se encarga de la digestión de las grasas y las proteínas y cuando se inflama, el problema principal es que “se auto-digiere” produciendo mayor inflamación aún.
Los signos más frecuentes de la pancreatitis en el bulldog son vómitos y dolor abdominal muy marcado. Puede haber también pérdida del apetito, diarrea y en casos severos, palidez, shock y hasta problemas respiratorios y de la coagulación.
Son importantes un diagnóstico y tratamiento rápido, ya que en casos agudos el riesgo de muerte de nuestro bulldog es alto.
En el tratamiento, excepto en casos leves, es necesaria fluidoterapia (sueros en vena) con analgesia intensiva y un estrecho control veterinario. Es una enfermedad grave. El páncreas de los bulldogs (y del resto de razas) es un órgano delicado.